¡¡¡Una vez más me enojé!!! Y por lo mismo…siempre me enojo, me da rabia esto, aquello y lo otro, la paso mal cada vez que me enojo pero me sigue pasando…yo creo que ya no voy a cambiar, soy enojona, ¿qué le voy a hacer?
Estas frases las he escuchado muchas veces
En algún momento de mi vida…me di cuenta que una de las palabras que más repetía en el día era “que rabia” y si…
Muchas cosas me daban rabia, vivía enferma y las cosas en mi vida costaba que fluyeran.
Ahora entiendo porqué…
Ahora comprendo cuando me decían que había que pensar positivo.
Después de muchos años he podido revertir mi vida y si bien…hay veces en las que si me enojo, cada vez es menos…mi vida fluye , mi cuerpo está más sano…y en mi vida prima casi todo el tiempo un sentimiento de paz y alegría que hacen que todo se vea muy muy distinto a como era antes.
El enojo muchas veces es una emoción que nos ayuda a poner límites, a decir basta cuando sentimos que nos están agrediendo, a defendernos y a exigir respeto.
Pero, muchas veces es una emoción que surge desde nuestro EGO, ¿Qué es el EGO?
Es una vocecita interna que nos habla todo el tiempo, es como un personaje que vive dentro de nosotr@s mism@s y que siempre quiere tener la razón, quiere ganar, quiere que lo vanaglorien, quiere llamar la atención, etc. Es un personaje lleno de miedos por dentro, pero que por fuera se muestra fuerte, valiente, capaz, soberbio, superior, etc.
Pues bien…si ¿revisas las razones de tus enojos? ¿Qué situaciones o personas te provocan enojo?
Una de las respuestas que más se repiten es:
Cuando no hacen lo que yo quiero, cuando las cosas no me salen como yo quería, cuando los demás actúan muy distinto a lo que yo soy o a como me gustaría que fuesen, cuando me quitan algo, cuando me dicen que no, cuando me mandan, cuando me ofenden, etc.
Creo que la mayoría de las veces es el ego el que se enoja y como vivimos sobreidentificados con el ego, nos pasamos enojando. El que se enoja es el ego.
Y si bien el ego forma parte de nuestra personalidad, no es todo lo que somos.
Una de las formas que he descubierto para trascender la rabia es dejar de vivir tanto desde el ego.
Hace muchos años atrás empecé un camino que fue el que más cambios produjo en mi vida, el camino espiritual…fue a través del yoga que me empecé a reconocer como un Ser íntegro. Más allá de mi mente…más allá de mi cuerpo…me di cuenta, que era un Ser espiritual, que esa es mi verdadera identidad y que había vivido gran parte de mi vida desconectada de mi esencia, yo le llamo ALMA pero lo importante no es el nombre…es saber que existe y que ese SER es el que realmente somos, lo demás es pasajero.
Y cuando comencé a vivir desde mi alma…mi vida empezó a cambiar…lo que antes me daba rabia…dejó de dármelo…porque comprendía lo que sucedía desde los ojos del alma…y aunque mi ego patalee, la voz de mi alma que es infinitamente sabia le explica a mi mente ciega las razones del porqué y para qué de cada situación.
Mi ego queda inmóvil ante la fuerza de mi alma…la calma, la comprensión y la compasión se activan. Y no hay lugar ni momento para la rabia.
La vida se vive distinta…hay más espacio para la felicidad y la paz interior.
Mientras más te relaciones con tu espiritualidad, menos enojos habrán en tu vida.
¿Cómo te relacionas tú con tu espíritu, alma, esencia?
¿Cada cuánto tiempo practicas aquello que te conecta con tu alma?
Para mí han sido de gran ayuda la: naturaleza, contemplarla…, respirar conscientemente varias veces al día, agradecer continuamente por todo (mínimo 2 veces al día), recordarme que soy un ser espiritual viviendo una experiencia humana, meditar, ayudar a los demás desde mi alma, alimentarme de sabiduría ( libros, videos, música que me eleve) y amarme con todo lo que soy…
Cuéntame tú… ¿qué haces para no enojarte tanto?
Mayo, 2018.